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CASTIGADORES DEL CAMPO DE BATALLA…

Una vez unidas bajo el estandarte del Gran Tharl, las tribus ogras y las ciudades-estado fueron enemigos jurados de los reinos humanos. Sin embargo, bajo la Paz de la Gran Reina, algunas naciones han comenzado a comerciar e incluso a aliarse con los Reinos Libres. Los mercenarios ogros han adoptado algunas de las costumbres y vestimentas más extravagantes de sus empleadores humanos y son enemigos formidables en el campo de batalla.

NO IMPORTA EL CAMPO DE BATALLA... SIEMPRE LISTO PARA LA LUCHA.

Desde las profundidades de los mundos selváticos, donde incluso la vida vegetal te comerá, hasta los pasillos fríos y con olor a ozono de los cargueros espaciales abandonados, los SPACENAM de Reptilian Overlords son los modelos perfectos para enfrentarte a devastadores invasores alienígenas, hordas de zombis o incluso a la IA rebelde.

Este conjunto de plástico duro de 20 figuras incluye un arsenal lleno de armas interesantes que incluyen rifles estándar, pistolas explosivas, armas blancas, granadas, lanzallamas, lanzagranadas, rifles de francotirador y armas de plasma y calor.

MUERTE DESDE ARRIBA...

Incluso antes de convertirse en el famoso Raumjager del circuito de los Campos de la Muerte, este grupo de guerreros humanos era una unidad de paracaidistas alemana de élite: los Fallschirmjäger.

En un momento estaban tratando de detener la marea del avance aliado cerca de Carentan, y al siguiente se encontraron a años luz de la Tierra, prisioneros de seres fantásticos con tecnologías aún más fantásticas. Los hombres del Regimiento Fallschirmjäger 6, 7.º Kompanie habían sido elegidos, como muchos de los mejores guerreros antes que ellos, para convertirse en gladiadores en el deporte más grande de la galaxia: el deporte de la guerra.

VIVE LA FRANCE!

El equipo comenzó con un núcleo de la Joven y la Vieja Guardia de Napoleón de Waterloo y luego fue reforzado con tropas del Frente Occidental de la Gran Guerra y décadas más tarde de las selvas de Vietnam. A lo largo de los siglos, su lengua y cultura francesas compartidas (y los oficios de los propietarios) los han unido como un equipo combinado en el circuito de Death Fields. Incluso después de siglos, los miembros de élite de Les Grognards van a la batalla con el grito: “¡Vive la France!”